¿Te ha pasado que le pides algo a ChatGPT y la respuesta te suena demasiado formal, vaga o simplemente no es lo que buscabas? Tranquilo, no es culpa tuya (ni suya del todo). Lo que pasa es que ChatGPT no es adivino. Pero hay una forma bastante sencilla de “educarlo” para que responda justo como a ti te gusta: personalizándolo.
Y no, no necesitas ser programador ni hacer nada raro. En este artículo te cuento cómo decirle a ChatGPT cómo quieres que escriba, qué tono usar y qué estilo prefieres, para que deje de sonar como un robot con corbata.
¿Qué significa personalizar ChatGPT?
Personalizar ChatGPT es como entrenar a un nuevo compañero de trabajo. Le dices cómo te gusta hacer las cosas: si hablas de tú o de usted, si prefieres respuestas directas o explicaciones detalladas, si te encanta el humor o si lo odias. Lo bueno es que con unas simples instrucciones puedes hacer que las respuestas cambien totalmente.
No necesitas tocar código ni configuraciones técnicas. Solo saber pedirlo bien.
¿Por qué deberías personalizar ChatGPT?
Porque si no lo haces, ChatGPT te responde “en neutro”. Y eso muchas veces significa:
-
Tono demasiado formal.
-
Frases tipo “de acuerdo a lo expuesto previamente”.
-
Textos que suenan a plantilla.
En cambio, cuando lo personalizas:
-
Te entiende mejor.
-
Se adapta a tu forma de hablar.
-
Ahorra tiempo, porque no tienes que corregir tanto.
-
Las respuestas encajan mejor con lo que tú tenías en mente.
Paso 1: Rellena las instrucciones personalizadas
Esto es lo más sencillo y lo más útil. Y mucha gente ni sabe que existe.
¿Dónde está?
Abre ChatGPT desde la web o la app.
-
Ve a la esquina superior derecha y haz clic en tu nombre o en los tres puntitos.
-
Pulsa en “Personaliza ChatGPT” o “Custom Instructions”.
-
Se abren dos preguntas clave. Vamos con ellas.
Pregunta 1: ¿Qué quieres que sepa ChatGPT sobre ti?
Aquí puedes contarle a qué te dedicas, cómo hablas y qué necesitas que tenga en cuenta.
Ejemplos reales:
-
“Soy autónomo y escribo muchos emails, quiero que suenen cercanos y sin florituras.”
-
“Trabajo en marketing. Quiero ideas ágiles, en tono informal y nada de frases de anuncio vacío.”
-
“Uso ChatGPT para crear contenido en redes. Me interesa que los textos suenen naturales y con ritmo.”
Cuanto más específico, mejor.
Pregunta 2: ¿Cómo quieres que responda?
Esta es la parte clave. Aquí puedes marcarle el estilo, el tono, el tipo de frases…
Frases que funcionan:
-
“Responde como si hablaras con un amigo, sin tecnicismos.”
-
“Frases cortas. Tono directo. Nada de enrollarse.”
-
“Si puedes usar ejemplos reales, mejor.”
-
“No uses frases tipo 'como modelo de lenguaje de IA'. Quítalas todas.”
Cuando haces esto, ChatGPT cambia de verdad. No es inmediato como un interruptor, pero lo notas. Mucho.
Paso 2: Afina lo que le pides (cómo hablarle bien)
Aunque hayas rellenado las instrucciones, cómo haces cada pregunta importa. Aquí van algunos trucos prácticos.
1. Especifica el tono
❌ Mal:
“Escribe un correo para un cliente.”
✅ Mejor:
“Escribe un correo breve y profesional, con tono cercano, para agradecerle el interés y proponerle una reunión.”
2. Usa ejemplos de lo que quieres
“Hazlo como este texto, que es claro, con frases cortas y sin lenguaje técnico.”
3. Di lo que NO quieres
“Evita frases formales tipo ‘le comunico por la presente’.”
“Nada de palabras rimbombantes ni expresiones raras.”
“No empieces con ‘Hola, soy ChatGPT’.”
4. Pídele que se adapte sobre la marcha
Puedes ir afinando sobre la marcha sin problema:
“Vale, ahora hazlo un poco más directo.”
“Reescribe lo mismo con un poco más de humor.”
“Más breve y menos serio.”
ChatGPT aprende rápido… si tú le marcas el camino.
Prompts que puedes usar tal cual
Aquí van algunos que te pueden ahorrar tiempo desde ya:
-
“Reescribe este texto con frases cortas, en tono natural, como si se lo contara a un amigo.”
-
“Explícalo sin palabras técnicas, como si lo entendiera alguien sin conocimientos del tema.”
-
“Hazlo sonar más humano, más real, y sin que parezca un robot.”
-
“Dame tres versiones del mismo texto: una formal, una informal y una con un toque de humor.”
¿Y si no lo personalizas?
Pues seguirá respondiendo con su estilo neutro. Correcto, sí, pero plano.
Y muchas veces no te servirá tal cual.
Si vas a usar ChatGPT para algo más que probar tonterías, te interesa que se adapte a ti.
Porque no se trata de que él hable “bien”, sino de que hable como tú necesitas.
Conclusión
No hace falta ser experto ni entender de IA para hacer que ChatGPT te responda mejor.
Solo hay que decirle lo que quieres. Como con cualquier persona: si no das contexto, no puede acertar.
Rellenas dos campos, ajustas un poco lo que pides… y de pronto tienes un asistente que suena más a ti que a un manual de instrucciones.
Y ahí es cuando ChatGPT deja de ser un juguete y se convierte en una herramienta útil de verdad.
¿Te interesa? Mira esto: